FERROGRAFÍA USADA EN EL MANTENIMIENTO PREVENTIVO
En la industria hay equipos en los cuales la frecuencia del mantenimiento predictivo está sujeta al cambio de aceite, es decir, que si se logran ampliar los intervalos de drenaje del aceite usado, es posible dejar el equipo en operación durante un periodo de tiempo más prolongado, ya que todos los aceites utilizados en sistemas cerrados o de circulación se oxidan y/o se contaminan durante su servicio, y los aditivos que poseen se agotan.
La ferrografía permite el análisis de la concentración, el tamaño, la forma y la procedencia de las partículas metálicas presentes en el aceite. También permite analizar metales no ferrosos, como el aluminio, la plata, magnesio, aleaciones de cobre, plomo-estaño. Otros compuestos que son identificados son los óxidos, los residuos de desgate corrosivo, los polímeros de fricción, polvo del medio ambiente, polvo de carbón, materiales de filtros, residuos de empaquetaduras y retenedores.
Es la técnica más exitosa y de mayor validez de uso en la industria, destacándose como una técnica que detecta, cuantifica y pronostica problemas mecánicos, que se manifiesta a través del desprendimiento de una cantidad y un tamaño anormal de partículas de desgaste.
La ferrografía capta partículas metálicas en el rango de 0.1 a 500 micrómetros, con lo cual no solo cubre el campo del desgaste anormal y traumático (10 a 100 micrómetros), sino que opera también en el rango de los espectrógrafos (espectrofotometría por absorción atómica); esto significa que pueden obtener mediciones evaluables y completas en todo rango.
Básicamente se analizan dos tipos de aceites:
1. Los empleados en la lubricación de maquina industrial (turbinas, sistemas hidráulicos, etc.), siempre y cuando la cantidad de aceite empleado justifique la inversión y el tiempo invertido para realizar el análisis.
2. Los utilizados en la lubricación de motores de combustión interna (gasolina, diesel, etc.), especialmente cuando al aumentar el tiempo entre e cambio, se puede ahorrar dinero o para evaluar la protección que le está dando el lubricante al motor.